Las personas libres jamás podrán concebir lo que los libros significan para quienes vivimos encerrados.
Ana Frank.

4 dic 2010

Sentir la nicotina



20/10/2010
No sé qué hacer, diario ¿Y si Ángeles descubre lo nuestro? ¿Cómo se lo tomará? Llevo días pensando en ello, no paro de comerme la cabeza ¡Arg! Ojalá no fueran primos, sino simples amigos.
Ayer me enteré de que la mayor parte de mis amigos saben que tengo un "más que amigo". Por suerte la identidad no la saben. Pero no tardará en llegar a oídos de Ángeles. Y obviamente cuando se entere me insistirá en que le dé explicaciones.
Tal vez me este preocupando más de lo que conviene. Al fin y al cabo se llevan de fábula y se tienen un gran cariño mutuo. Lo mejor que puedo hacer es respirar hondo y desvanecerme en un soplo.

Anoche, viernes, quedé con Javi. Fuimos a dar una vuelta por el puerto de nuestro pueblo. El cual estaba a rebosar de grandes barcos. Y de olas gigantescas que no paraban de amenazar con su gran inmensidad.
Nos sentamos en uno de los muros que separa la playa del pueblo. Viendo la mar, saboreando aquella agradable y fría brisa, mirándonos mutuamente, esbozando una sonrisa, yo me consumía. Se acercaba y mi piel en llamas se convertía. Pero lo quería más cerca, más aún, quería que se enganchara a mí para que no se separara jamás.
- ¿Tú estas segura de que no llevas nicotina? - Me susurró en el oído.
Sonreí y noté como era él la única persona que hacía que mi sangre subiera a mi cabeza ardiente. Silenciosamente le besé. Quería notar sus labios, aquellos que cuando me tocan hacían que mi ritmo cardíaco se alterase. Uno detrás de otro. Así sucesivamente sin parar a respirar, ni un soplo de aire.
Noté como mi sentimentalismo iba creciendo a cada latido de mi corazón. Así que me separé y empecé a reírme como si fuera exclusivamente el mejor instante para expulsar esa alegría que tenía contenida dentro de mí. Él me observaba extrañado pero no tardó en unirse a mis histéricas carcajadas.
- ¿Debería reírme? - me dijo mientras intentaba acariciarme el rostro.
- Supongo - dije mientras intentaba dejar de reír.
Él mientras tanto se acerco a mí con su mejor sonrisa y me abrazó. Fue uno de esos abrazos que te transmiten una enorme calidez, aquellos que te empapan en un cariño tan infinito que nunca desearías que tal abrazo terminase. Le apreté fuerte hacia mi cuerpo ya que debido al frío de la tarde que se hacia notar y lo necesitada que me sentía en ese momento de cariño aquello era la mejor medicina que se me podía dar.
Tras estar horas y horas abrazándonos, riéndonos y haciendo mil y una tonterías decidimos volver a nuestras casas. Le iba a echar de menos aunque fuese solo una noche sin verle, aunque esa noche la pasara durmiendo, estando inconsciente, iba a notar su ausencia, extrañar su calor corporal, su colonia de Antonio Banderas, extrañarle a él en su conjunto con sus defectos y sus virtudes.
Cogió el móvil y marcó el número del móvil de su padre, le diría que fuera al puerto a recogernos. Cuando colgó me miró con ternura y me dijo con una pizca de melancolía.
- Te voy a echar de menos Susan.
- No más que yo a ti - Le dije sonriendo. Me sentía llena de felicidad ya que había descubierto que él sentía y pensaba lo mismo que yo. Eramos como dos corazones que latían al son de uno.
- Te cuesta intentar dejarme quedar bien por un instante ¿no? - Me dijo riéndose y acercándose a mí para darme el último beso de buenas noches. La verdad tenía razón me costaba dejarle quedar bien aunque fuese solo un segundo de nada, siempre quería ser yo la que en la pareja era la que más notara ese ardor lleno de amor. La que más le amaba a él que él a mí.
El padre no tardó en llegar al puerto. Era un hombre alto y esbelto, de facciones muy rasgadas, ojos extremadamente azules y una simpatía que le destacaba entre todos los habitantes del pueblo. Sin duda alguna se parecía mucho por no decir bastante a Javi.
Nos montamos en el Picasso y me llevó a mi casa, lo cual le agradecí mucho. Por poco que hagan por mí soy capaz de darlo todo. Llegamos; cuando salí del coche Javi desde la ventanilla me gritó.
- ¡¡Suusaaan se te olvidaaa estooo!! - Preguntándome que se me podía haber olvidado, ya que ese día no llevaba bolso y el móvil lo notaba en el bolsillo del pantalón, me acerqué a la ventanilla y Javi con la mano cerrada permitiéndome no ver nada me metió "eso" en el bolsillo de mi sudadera.
- Buenas noches Susan - me dijeron los dos mientras ponían el coche en marcha.
- ¡Buenas noches y muchas gracias por traerme! - Grité haciendo un gesto con la mano.
Sin más dilación y muerta de cansancio me dirigí hacia la puerta principal de mi casa y llamé al timbre ¡Ding, dong! ¡ding, dong! Me abrió Ivan comiéndose un trozo de bizcocho de chocolate y poniéndolo todo asqueroso.
- Menos mal que eres el mayor de los tres, menudo ejemplo das hermanito - Le dije enfadada ya que sabía que me iba a tocar barrer todo los granos de bizcocho que se le iban cayendo.
- Marimandona ¡Jum! - ¿¡Cómo!? ¿¡Yo marimandona!? Pero si...¡buag! mejor dejarlo no vale la pena pelearse con él, ni siquiera hablarle, con 18 años y menudo bárbaro.
Me acerqué al salón donde estaban mis padres. Mi padre leía uno de sus intrigantes libros y mi madre planchaba a la vez que veía el telediario. Saludé y me acerqué a la chimenea, estaba helada.
- ¿Qué tal te ha ido, cariño? - Me preguntó mi madre con ese amor materno que solo ella me sabía transmitir.
- Muy bien mamá, con un poco de frío pero por lo demás muy bien - Esbocé una sonrisa.
- Mira que te dije que te pusieras otra chaqueta, pero tú no, que no ibas a pasar frío ni nada, y encima llevas las converse o como se llamen, debes tener los pies helados, no sé porque me preocupo en darte consejos. - Ya empezábamos ¡Nooo! Siempre pasaba de la madre comprensiva a la madre enfurecida.
- Mamá tu no me dijiste nada de las converse - Intenté decirlo con mi mejor tono de voz.
- Claro si tu solo escuchas lo que te interesa, y cómo no tienes zapatos, pobre mi hija que no tiene zapatos - Me dijo con cierto sarcasmo ¡Buag! Me iba a costar contenerme.
- ¿¡Cómoo!? Pero si las botas nuevas que me compraste las rompió Jorge cuando se tropezó con ellas - Le eché una mirada asesina a Jorge que en aquel momento estaba pendiente de la discusión.
- Si no las hubieras dejado en medio no hubiera pasado nada, no le eches la culpa a Jorge - Me gritó.
- ¡Esto es el colmo! ¡Ahora soy yo la que tiene la culpa de que tu hijo vaya cargándose todo lo que pille a su paso! y encima no estaban en medio. - Mi sangre se empezaba a sulfurar.
- Si, si, si, si ... di lo que quieras Susan, que sepas que este invierno no hay más botas nuevas ¡se acabó!
- ¡Maaamáááá! ¡Por favoor! Las botas del año pasado están atrofiadas y son un completo asco - Grité harta de que siempre tuviera que pagar conmigo su mal humor.
- Ya basta Susan ¡sube a tu habitación! - Me ordenó  mi padre harto de escucharnos discutir.
Salí enfurecida y con lágrimas en los ojos del salón y corriendo subí por las escaleras y me metí en mi habitación. Di un portazo para que se dieran cuenta de que me sentía muy disgustada y me tumbé en la cama.
"¿Por qué no podíamos tener una conversación en condiciones? ¡Nada más llegar a casa y ya están descargando sus proyectiles en mí!"
Ensimismada en mis pensamientos me giré en la cama y noté algo en el bolsillo de la sudadera ¡Javier! Se me había olvidado completamente ¿Qué sería lo que me metió en el bolsillo? Muerta de curiosidad metí la mano en el bolsillo y saqué una pequeña carta, la abrí y decía lo siguiente:

"BUENAS NOCHES AMOR MÍO
TE AMO"

En grandes letras ocupando medio folio pude leer esto. Supuse que lo escribió en el coche ya que vi desde el asiento de atrás como cogía papel y lápiz y se comía la cabeza para escribir algo y ¡PUF! si que se comió la cabeza para escribir estas 6 palabras. Aunque por muy poco que sea se lo agradezco muchísimo.
Sonriendo lo pegué en el enorme espejo que tenía en mi dormitorio con fotos pegadas y algunos apuntes que me escribían mis amigas, ahora formaba parte de mis recuerdos.
Me tumbé de nuevo en la cama y empecé a divagar de nuevo por mis miles de pensamientos. Hasta que en un abrir y cerrar de ojos me quedé dormida, acurrucada en mi almohada y en mi inmensa manta de punto. 
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana.


¡Saludos bloggers! Os pido perdón por haber tardado tantísimo en publicar, me ha sido claramente imposible poder ponerme a escribir ya que últimamente con los estudios y demás me cuesta tener un rato para escribir. El capítulo de hoy no es de los mejores pero espero que os guste. Intentaré escribir más a menudo o todos los fines de semana dos entradas para ir adelantando historia y no dejaros 3 semanas o más con intriga (aunque no creo que mi historia de mucha intriga). No os aseguro que vaya a pasar porque como siempre hay unos cuantos contras. Esta semana como hay puente intentaré escribir otras dos entradas. Espero que pueda o por lo menos pueda escribir una más. También deciros que hoy o mañana me iré pasando por todos vuestros blogs para ponerme al día ¡echo de menos leerlos! y naturalmente os comentaré todo lo que pueda. 
¡Muchísimas gracias a todos los que me seguíis! de verdad muuchísimas graciaas. No me imaginé que llegara a los 31, es mas ni pensé que tuviera 10, para mi es una gran meta haber llegado a los 31, aunque todo os lo debo a vosotros. En fin me dejo de sentimentalismo ¡GRACIAS!   
¡MUUCHOS BESOOS! & ¡MIL GRAACIAS! de nuevo :) 

Os quiere Alas Clarín.

8 nov 2010

Enséñame a olvidarme de pensar


18/10/2010
Perdóname diario. Llevo unos días en los que ni siquiera te he rozado. A veces me olvido de plasmar mis recuerdos en ti. Estoy tan atenta en él que mis pensamientos se diluyen haciendo que me quede embobada pensando solo y únicamente en él. Pero se acabó. Prometo escribirte con más frecuencia.
Tengo tantísimas cosas que contarte que no sabría por dónde empezar. Una de ellas es de Javier, cada día que le veo, aunque solo pueda los fines de semana, mi amor hacia él aumenta más y más. No sé que tiene, un poder de atracción o algo por el estilo que me cautiva y no me deja escapar. A veces es como si él fuera un imán y yo un simple trozo de metal que queriendo o no es atraído como si tal cosa.
Ayer fui a su casa, sí diario, por primera vez fui y debo decir que es enormemente enorme y su dormitorio ni te cuento, según él no hay cuarto más pequeño en el mundo, exagerado; he hecho cuentas y podría ser de grande como mi cuarto más el de mi hermano Jorge más el cuarto de baño que compartimos ¡sí! ¡una burrada!
Fui a su casa con la excusa de que no comprendía un pequeño trabajo de Química que en realidad si comprendía pero bueno cualquier cosa por verle. Tuve suerte de que hoy tenía el día libre y podría ayudarme aunque eso sí no hicimos ni el huevo; me enseñó su casa, todos y cada uno de los rincones que la componían, el jardín también enorme, alguno de sus hobbies como montar y arreglar motos (sí, un hobbie algo extraño pero en fin eso es lo que nos hace únicos). Cuando me enseñó una de sus motos mostré tanta admiración que insistió en llevarme a pasear en moto por las calles de su barrio, acepté su oferta a pesar de que por dentro no quería ni tocar la moto.
¿Y sabes? no me arrepiento de haber aceptado. Fue expectacular, genial, ... notar la adrenalina en tu cuerpo, los cabellos rozándome la cara por la vertiginosa velocidad, el aire golpeándome la cara.
Al principio debo admitir que me cagué pero con el paso de los segundos y viendo que Javier estaba al lado mía dándome una pizca de seguridad hizo que mi cuerpo se desenvolviera en el ambiente y no pensara en esa sensación como es el miedo.
Pasados quince minutos paramos en un pequeño parque con grandes árboles. Era precioso. Aparcó la moto y nos sentamos en un pequeño banco junto a un pequeño roble. Estábamos el uno al lado del otro mirándonos, notando la respiración de cada uno, su incesante aspirar y expirar. Cada vez le notaba más cerca de mí, su calor corporal me envolvía y me transmitía calidez. Hubiera deseado que en ese momento se hubiera parado el tiempo. Ojalá, claro que los sueños... sueños son.
En ese momento noté como Javier se separaba rápidamente de mí con una palidez extrema en su rostro. Me asusté obviamente y a punto de articular palabra un chaval de tez morena se acercó a nosotros acompañado por una chica de más o menos mi edad y dos chicos.
- ¡Ey tío! ¿tú por aquí? - Dijo el chaval sonriendo y dirigiéndose hacia Javier.
Javier se levantó rápidamente y le hizo el típico saludo entre ellos. Después empezaron a hablar silenciosamente por lo que no me enteré de nada. La chica que venía con ellos fijó la mirada en mí desde que se acercaron a nosotros, no me apartaba la vista la muy descarada. Me intimidaba. Intenté hacerle señas disimuladamente a Javier para que nos fuéramos a otro sitio. Me sentía incómoda. Cuando pareció haberlo captado se dirigió a mí y dijo:
- Por cierto que casi se me olvida, chicos esta es Susan y Susan estos son Álvaro, Juan Fran, Carlos y Verónica - Les di dos besos a cada uno excepto a la tal Verónica que se me apartó con cara de asco.
- ¿Es tu chica Javi? Tío me tienes que decir el secreto, cada día estas con una - Carlos, era rubio y el de estatura algo más baja, parecía el más simpático aunque su comentario no me agradó mucho.
- ¿Para qué tener una novia para un día? Al fin y al cabo al otro día será un hola y adiós. Pobrecita.
- ¿Por qué no te callas Verónica? ¿Acaso estas celosa? - Javi...
- ¿Celosa yo? De eso nada guapo y menos de una cría como ella - Me entro de todo por el cuerpo. Quería saltar a la discusión en ese momento pero prefería callarme, no me apetecía pelearme con ellos nada más conocerlos.
- Lo nuestro terminó Verónica no intentes arreglar lo que pasado está, es inútil volver sobre lo que ha sido y ya no es - ¿Eing? ¿Estuvo con esta? - Vámonos Susan - Me miró y me cogió del brazo.
- ¡¡Di lo que quieras pero que sepas que el pasado siempre estuvo, está y estará presente!! - Se escuchó a Verónica gritando desde donde estábamos hace unos segundos. En sus palabras cargadas de odio se notaba melancolía y tristeza. Javier no miró hacia atrás.
Nos montamos en la moto y fuimos a su casa. La vuelta se me hizo eterna no paraba de pensar en la estúpida Verónica ¿fue por ella por lo que se puso tan pálido?
Al llegar fuimos directamente a su dormitorio. Allí me senté en un sillón muy mullidito y suave de color rojizo, estaba agotada y no sabía el por qué.
Javier tenía la mirada perdida. Empecé a observarle con ternura. Le noté triste.
- Siento lo de antes - Me susurró mirando el suelo.
- No te preocupes. Además tú no hiciste nada fue tu amiga.
- Sí, Verónica - se acercó a mí y se sentó en el suelo. Clavó sus ojos en mí - Aún así lo siento -
- Repito que tú no has tenido la culpa y además ha sido una tontería.
- Lo siento - dijo en un hilo de voz.
- Después que si yo soy pesada cuando te pido disculpas. Tú me superas guapo.
- A ti nadie te supera en nada, ni en belleza, ni en inteligencia, ... en NADA eh
- ¡Ejem! ¿pero que me estas diciendo? Por favor no empecemos sabes que soy del montón.
- De eso nada monada.
- ¡Que sí! y no se habla más.
Empezó a reírse como si nada. Las carcajadas no paraban de sonar. Esbocé una sonrisa. Me alegraba volverle a ver contento. Al poco rato se le pasó las ganas de reír y volvió a decir.
- Bueno en lo que estábamos, que lo siento mucho, en serio, no me digas que no tuve la culpa ni nada por el estilo, lo siento y quiero que lo sepas - Ya empezábamos.
- ¡Ajá! Pues yo quiero que sepas que no tienes por qué dármelas y no me lo discutas.
- ¡Mala! Siempre te tienes que salir con la tuya, no me puedes dejar quedar bien - Me sonrió y nos fundimos en un beso. Esos besos cálidos y elocuentes.
- Te amo - me susurró en el siguiente beso que nos dimos.
- Yo más aún.
Cuando nos quisimos dar cuenta eran las 19:30 de la tarde. Tenía que volver ya a casa, mis padres me iban a matar. Recogí el trabajo y lo metí en la mochila con ayuda de Javier.
Nos dimos un último beso antes de salir de su dormitorio y me acompañó a la puerta. Allí le di un pequeño beso en el moflete y nos despedimos. ¡Oins! Me daba tanta pena separarme de él y no volverle a ver hasta el fin de semana que viene. Aún así me consolaba la idea de que por lo menos hablaríamos por teléfono.
Me dirigí a la parada de autobús desde donde cogí el último bus para llegar a casa. Una vez en casa mi madre me hizo uno de sus típicos interrogatorios sobre lo que había hecho en la tarde y pidiéndome todos los detalles sobre su casa ¡Madres!
En fin diario mañana pasaré a contarte otra de las miles de cosas que tengo que contarte.

Susana.

27 oct 2010

Carpe diem


14/10/2010
Querido diario, hoy me encuentro sumergida en mis pensamientos, en mis pensamientos sobre él. No quiero hacer otra cosa que no sea pensar en él; no quiero soñar; no quiero hacer nada que me lleve a un uso involuntario de mi mente. Solo y únicamente quiero fijar mis pensamientos en él ¿por qué? porque estoy enamorada, simplemente enamorada, nada más.
Ayer sobre las 20:45 me llamó. Hablamos durante cinco minutos, tiempo suficiente para deleitarme en su cálida voz; me pareció estar soñando y aún me lo parece, es curioso ver como todos esos sueños que fuiste formando poco a poco se desvanecen convirtiéndose en realidad.
Anoche leyendo un libro llamado Maldita adolescente que me mandó mi sabio profesor de Literatura, Don Antonio, llegué a un párrafo donde en el pasado me hubiera sentido totalmente identificada con quién lo escribía, decía así:

"El miedo a perder tu amor, Adriana. El miedo a que mi amor por ti quede hecho trizas. El miedo a los malos entendidos. El miedo a compartirte con los demás. El miedo a desnudar mi alma del todo. El miedo a la caducidad. Quiero que sea un amor imperecedero, incorruptible, eterno. Necesito tenerte siempre a mi lado Adriana, adivinarte a través de tus movimientos, de tus miradas. Necesito que sigas siendo mi diosa, adorarte cada día, cada una de tus palabras, de tus gestos. Necesito descargar mi alma contigo. Necesito tu apoyo, tu empatía. Porque eres lo único que me mantiene con vida. Soy como el moribundo que se aferra a la máquina que ventila sus pulmones. No puedo perderte ahora. Lo entiendes, ¿verdad? Quiero amarte siempre, Adriana, cada momento del día."

Todas y cada unas de las palabras hacían que una lágrima se me escapara de mis ojos. Me emocioné. Tal vez con esta parte del libro no te enteres muy bien del por qué de mi emoción, diario. Es tan triste leer los pensamientos de alguien que sufre por amor, es tan triste que la persona a la que amas no sepa ni que existes, es tan triste la trama del libro; te sumerge en una infinita agonía leer tal libro aunque me encanta leer cada uno de sus párrafos. Es como un AMOR imposible, diario.
Hay días en los que me da por pensar si merece la pena sufrir por amor; dime, diario ¿merece la pena? Sinceramente creo que no vale la pena ¿por qué desgarrarte, afligir, caer en depresión por amor? ¿acaso no es mejor vivir este don del que nos han dotado, este regalo que nos dieron nada más abrir los ojos al mundo, acaso no es mejor vivir la vida? En mi opinión, es mejor disfrutar y vivir al máximo. Pienso que sufrir por un amor no correspondido o que no esté a tu alcance es una manera tonta de desperdiciar la vida. Pensamientos que me atormentan la cabeza y que nunca sabré si están en lo correcto o son pensamientos vagos de una mera adolescente.
Aún así apoyo el vivir al máximo y el evitar sufrimiento alguno.

Cuando me llamó, no supe que decir, empecé a tartamudear, hablar sin coherencia. Pensé que seguramente se le estaría pasando por la cabeza la gran locura que poseo dentro de mí pero ¿sabes qué diario? él es distinto, no piensa lo que la mayoría de la gente piensa, no, no, él es único y por eso lo amo.
- Creo que me estoy volviendo loca...¿a que sí? - dije en un intento por saber su opinión.
- A ver, mmm...sí, como una regadera, chalada, chiflada, majadera, loca de atar...pero te voy a contar un secreto: las mejores personas lo están.
¿Te he dicho, diario, que lo amo con locura, con todo el amor que soy capaz de dar? Cada palabra que dice me revela tantísimas cosas de las que estuve totalmente ajena. Supongo que por ese pequeño detalle lo amo aún más que cuando le conocí a simple vista.

Tras acabar de hablar con él, mi corazón estalló en miles de gritos de júbilo. Tanta era mi alegría que al ver que aún llovía, cogí mi chubasquero y salí descalza al jardín. Estiré totalmente mis manos y fijé mis ojos en el inmenso cielo nublado. Empecé a dar vueltas, bailar, gritar, reírme sin saber el por qué. Aún así quería seguir aunque ello significara no saber el motivo, no me importaba, en ese momento lo único que quería era sentir las diminutas gotas de agua caer sobre mí.
Mis padres se encontraban en el salón, me miraban atónitos desde la ventana que daba al jardín ¿creerían que estaba loca? y si lo estoy ¿que más da? ¿Acaso las mejores personas no lo están?
Al ver que la lluvia empezaba a dar la peor de sus caras, mi padre vino hacia mí a paso lento con una suave y mullida toalla, me la puso sobre los hombros y me susurro:
- ¿No crees que ya es hora de calmar tu alocada locura, cielo? - decía al mismo tiempo que me esbozaba una sonrisa.
- Sí, papá - Le di un pequeño beso en el moflete y corriendo entré y me fui a la ducha.
Sentir el agua caliente sobre mi piel me haría entrar en calor y recuperar el aliento. Lo necesitaba.
Tras terminar me tumbé en mi cama, cogí el MP4 y lo puse a todo volumen, seguidamente fije mis ojos en el techo, no se por qué pero me apetecía observarlo aunque en verdad no lo observaba más bien lo miraba, es decir, miraba sin saber el qué, estaba sumida en mis pensamientos, en los amo que tantas veces digo, en el abrazo de aquella tarde, en los besos que me hicieron ver las estrellas; sí, en todas esas cosas, pero no observaba.
¡Carpe diem! 
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Tu alocada Susana.

17 oct 2010

Realmente enamorada


13/10/2010
Soñé con él. Con el momento en el que él me besó por segunda vez. Con el momento en el que él dejó una gran señal en mi corazón, una señal que nunca, ni por los siglos de los siglos, conseguirá borrarse de aquel sitio que ya le pertenece, mi corazón.
Diario, no sabría cómo explicarte lo que viví en aquel momento, fueron una mezcla de tantas sensaciones agradables; fue como un sueño, un sueño que nunca pensé que se hiciera realidad. En definitiva fue mejor que el primer beso que me dio. No sé como lo hace que cada vez que mis labios rozan los suyos las sensaciones que siento son aún mejores que la anterior.
Tras empezar a caminar silenciosamente acompañados por la tenue lluvia que caía y caía empapándonos cada vez más y más, Javier cogió un mini paraguas que tenía en el bolsillo y lo abrió. Tenía todos los colores del arcoiris, era hermoso. Caminamos y caminamos siempre con el silencio por medio. Las cuerdas vocales se me habían paralizado, no podía articular palabra, me sentía tan nerviosa. Él en cambio me lanzaba alguna que otra sonrisa cuando intercambiábamos miradas para ver como estaba el otro. Le veía muy callado ¿estaría tan nervioso como yo? Quién sabe.
Caminábamos a paso lento como si ninguno de los dos quisiera que ese momento acabase nunca. Escuchábamos las gotas caer sobre el animado paraguas, el ruido me tranquilizaba, me transmitía confort.
Llegamos a una curva, mi casa estaba a apenas veinte pasos de aquella curva. Se paró, me paré con una mueca en la cara ¿acaso no quería seguir? Me miró y me dijo con sus sonrisa siempre en sus labios:
- Bueno, ya hemos llegado, si no me equivoco esa es tu casa - Estaba dudoso.
- Sí, esa es mi casa, la de color rosado y con una enorme ventana en el centro, mi ventana - Calló.
- En fin muchísimas gracias por acompañarme ... - Le dije pero me cortó antes de que pudiera articular palabra alguna.
- Em sí, no hay de qué, ha sido un placer pero ... bueno déjalo, nada - ¡Dilo!
- Entonces adiós. Hasta pronto - Dije. Le hice un gesto con la mano ¡Oh! ¡Qué tonta soy! Dile que quería decirte, insiste.
- Un momento - Me cogió del brazo y me acercó a él pausadamente. Fijó sus enorme ojos en mí.
- ¿Sí? - Se formó una gran tensión entre nosotros, mis ojos casi empezaron a lagrimear de la emoción que sentía en aquel momento.
- ¿Te volveré a ver pronto?
- Claa...claro...mm...ss..sii, claro...que sí - ¡Ah! ¿Por qué en estos momentos las palabras no querían salir de mi boca? Empecé a tartamudear como una loca, estaba muy nerviosa, empecé a decir tonterías una detrás de otra sin entender siquiera yo lo que decía pero en ese momento me besó.
En efecto, soñé con ese beso, fue aún mejor que el primer beso que nos dimos. Le abracé y le sujeté fuertemente hacia mí; no, no quería que se separara de mí, no quería que pasasen días y días hasta volverle a ver, no quería sufrir más.
Él aceptó mi abrazo. Sentí los latidos de su corazón. Iban a tal velocidad que cualquiera hubiera supuesto que estaba tan nervioso como yo. Me acarició el moflete que pasó de blanco como la nieve a ponerse rojo como un tomate, tras esto me besó en él. Me puse más colorada aún, pero eso ya no me importaba. La gente pasaba y pasaba y se quedaban mirando descaradamente como permanecíamos él y yo abrazados el uno al otro pero a nosotros no nos importaba, lo único que me importaba en ese momento era él. Le amaba tanto. Y pensar que nunca me había dado cuenta de lo que el significaba para mí, pensar que era el primo de mi mejor amiga y que nos habíamos visto tantas veces y que nunca me hubiera dado cuenta de cuánto lo amaba.
Empezó a llover cada vez con más intensidad. Íbamos a coger un catarro como no nos alojásemos en algún lugar cubierto.
¡Mierda! Se me olvidó que mis padres me esperaban para almorzar, me pegarían una buena regañina, aunque que más da que me regañaran, si estaba con él me daba lo mismo.
Se acercó a mi oído y me susurró dulcemente.
- Será mejor que vayas a tu casa, tus padres te estarán esperando y no quiero que te regañen. Además el tiempo esta empeorando y vamos a coger un buen resfriado - ¡Qué mono! Se preocupa por mí.
- Tienes razón pero ¿me das tu número de móvil?
- No me lo sé y encima se me ha olvidado el móvil, hace apenas tres semanas que estoy con uno nuevo pero tranquila tengo el tuyo, lo cogí del móvil de Ángeles - ¡Oins! Bueno si es mono.
- Ajá. Cuando quieras puedes llamarme. Hasta la próxima - Mis ojos soltaron una pequeña lágrima.
- Hasta pronto. Te quiero Susan, te quiero mucho - ¿Esto es un sueño? No despiertes nunca Susan.
- Yo también te quiero Javier; gracias por todo - Le sonreí y me dirigí corriendo hacia mi casa con lágrimas en los ojos, me sentía contenta porque por fin le había dicho que le quería y triste porque no me quería separar de él pero debía hacerlo.
No volví a mirar hacia atrás, no podía porque sino lloraría más. Llegué al portal de mi casa con Lena y Fredi que habían estado jugando alrededor del parque de mi barrio. Me sequé las lágrimas antes de entrar no quería que mis padres me vieran así ¿que pensarían? Entré corriendo con la cabeza agachada hacia mi habitación. Mi madre me gritó para que bajara a comer y seguramente para pegarme una regañina de paso por el retraso. Entré en mi habitación y cerré la puerta. Me acerqué al espejo y vi mis ojos hinchados ¿tanto había llorado? Me los sequé un poco y intenté sonreír. Sí, perfecto.
Tras esto me tumbé en la cama, no tenía apetito, empecé a darle rienda suelta a mis pensamientos. Le adoraba tanto. Me había hecho la adolescente más feliz del mundo.
¡Te quiero Javier! ¡Te quiero mucho!
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Tu aún más enamorada Susana.

16 oct 2010

Un día de lluvia


12/10/2010
Me desperté por el agitado ruido de los árboles que se movían sin cesar debido a los vientos torrenciales que hoy se daban, las gotas caían brutalmente en la ventana que tengo situada en el techo la cual me permitía ver las estrellas en las noches despejadas. Me levanté un poco adormilada de las cálidas sábanas que cada noche me hacían viajar a un nuevo mundo, el mundo de los sueños. Me acerqué al armario y cogí mi sudadera favorita de color rojo fuerte, debes saber diario que uno de los colores que más me apasionan es el rojo, tras ponérmela cuidadosamente me acerqué a mi fiel espejo, digo fiel porque cada vez que me reflejo en él me veo bella por así decirlo, me miré fijamente y divisé un granito del tamaño de una gota de agua, a pesar de su pequeñez no soportaba tener tal cosa, corriendo fui al baño y me masajee con un algodón vertido en tónico sobre el grano; sí, señor, ahora estaba más tranquila.
Salí del baño. Sentía mis pies fríos, muy fríos, debía tapármelos si no quería coger un resfriado o no dejar de temblar. Fui al cuarto de Iván que seguía aún dormido como un tronco y naturalmente le robé las zapatillas, sus reconfortantes zapatillas, siempre tan calentitas y tan suaves; las mías se me rompieron hace poco así que tenía que hacerme con las de mi hermano o las de mi padre, que eran las más mulliditas de la casa.
Bajé al salón y puse la TV. Nada, no salía nada interesante. Apagué la TV y me fui a mi cuarto nuevamente, deseaba sentarme en mi ventana y disfrutar y sentir la lluvia. Adoraba contemplar como las diminutas gotas de agua caían y caían sin remedio alguno. Adoraba ver los árboles bailando con el frío viento. Adoraba escuchar el sonido tan reconfortante que me transmitía. Adoraba el olor a tierra mojada. Me senté al lado de la ventana y me puse a hacer dibujitos en el fino cristal: corazones, caritas, letras, todo lo que se me antojaba en aquel momento pero no tardé en sentir aburrimiento. Puse lentamente mis manos en el cristal pero rápidamente las quité no soportaba el frío horripilante que me transmitía el cristal, me dejaba helada, aunque eso me gustaba, me gustaba sentir el frío recorriendo mi cuerpo.
Me incorporé y miré a través de la ventana de nuevo, veía los pajaritos meterse en sus nidos, los perros buscando un lugar donde poder alojarse. Observé como las gotitas empezaban a limpiar el paisaje que nos rodea, sí, nuestra adorable naturaleza.
Me volví y me tumbé en la cama, estaba helada. En un pis pas mis pensamientos empezaron a resurgir, pero resurgieron de una manera placentera. Miles de recuerdos se me vinieron a la cabeza, uno de ellos el día que quedé con una gran amiga Jasmine, de nacionalidad inglesa, de cabellos rubios y lisos y de ojos verdosos, una chica verdaderamente guapa. Estuvimos tomando helados, yo dos ya que gracias a que soy muy patosa uno se me cayó y tuve que comprarme otro. Estuvimos riéndonos a carcajadas sin parar a respirar siquiera. Estuvimos bailando y haciendo miles de locuras en un milenario parque de mi pueblo, donde los árboles alcanzan alturas asombrosas. Un día como ninguno. También recordé el día en el que Javier me besó que por cierto no logro entender el por qué del beso, me parece imposible gustarle, siento que es demasiado para mí, si suena raro, lo sé, pero es que me parece tan perfecto y cuesta creer que alguien tan como él quiera a una persona como yo ¡Líos y más líos! Pero, ¿sabes diario? Daría cualquier cosa por volverle a ver, volver a ver sus grandes ojos verdosos, sus labios carnosos, su melena castaña, .... ¡Ah! ¿Por qué soy así? Un día intento pasar de él, no recordarle y al otro día estoy soñando con él, con verle ¡No puedo más! Ni siquiera sé que es de él y por supuesto a Ángeles no le voy a preguntar ya que no me gustaría que se enterara de que me gusta, dios sabe lo que se le pasaría por la cabeza a mi querida bribona ¡No! Prefiero guardármelo por ahora y dejar de pensar en él durante una larga temporada ya que si algún día le muestro mis sentimientos y me devuelve una respuesta no correspondida me entraría un dolor enorme y no quiero sentir eso, no quiero que me rompan el corazón, no quiero ser esclava de alguien que no me ama, no, ni hablar.
Me levanté de mi cama harta de darle rienda suelta a mis pensamientos. Siempre conseguían sacarme de mis casillas. Bajé a la cocina, mi estómago empezaba a hacerse notar. Traté de tomarme un calentito vaso de leche con cola-cao y unas tostadas con mermelada, hoy no me encontraba con muchas ganas de hacerme un festín para desayunar, hoy quería algo ligero. Tras terminar vi como mi familia empezaban a armar su ruido matutino, levantarse, gritar, bajar las escaleras como caballos, poner la TV y la radio a tope, .... ¡Qué cruz de familia!
Decidí ir a vestirme y después salir a pasear a mis dos perrillos, Lena & Fredi, me encantaba pasear en los días lluviosos por mucho frío que hiciera. 
Salí de mi casa con unas largas botas por si las moscas me daba por saltar en algún charco. Cogí a Lena y Fredi de la correa y empecé a andar hacia... donde me llevara el frío viento. Caminé y caminé. La lluvia caía sobre mí, empapando mi celeste chubasquero; la punta de mi nariz estaba congelada, tiritaba de frío. Lena y Fredi correteaban y se metían en los charcos ¿acaso no sentían el frío tan espeluznante que hacía? Parecía que no. Me senté en un banco que vi a lo lejos, estaba tapado por un enorme árbol que no dejaba que la lluvia lo traspasase. Tras unos minutos noté como alguien se sentaba en el lado contrario del banco, quise girarme a mirar pero tenía un mal presentimiento. Escuché como suspiraba el extraño, parecía algo cansado. Empecé a observar a mis perros pero ¡error! Lena no estaba me levanté y ... 
- ¿Este perro es tuyo? Parece que no quiere separarse de mí ¡Jajaja! - Me giré y lo vi, no me podía creer lo que veía.
- ¡Javier! ¿Tú..tú por aqu...aquí? - La palabras se me entrecruzaban y no me dejaban pronunciar.
- ¡Susan! ¡Qué sorpresa! Hacía años luz que no te veía - Cierto.
- Sí, desde que estuvimos en casa de Ángeles - Se quedó mudo, parecía que esa frase no era muy de su agrado.
- Sí...dess...desde..ese día - Frunció el ceño y me dio la correa de Lena. Me pareció verle aún más guapo que la última vez, su larga melena le resaltaba sus grandes ojos.
- Bueno Javier un placer haberte visto, debo volver a mi casa mis padres me esperan para almorzar - ¿Por qué los mejores momentos tienen que ser los que menos duran?
- ¿Te puedo acompañar? - ¿En serio me ha preguntado eso? ¡Qué alegría! 
- ¡¡Claaarooo!! - Lo dije casi chillando, me sentía muy contenta pero no quise aparentarlo mucho así que me puse un poco seria.
Empezamos a andar por las grandes calles silenciosamente. Ahora de verdad comprendía cuales eran mis verdaderos sentimientos hacia él. Le amaba. Sí, le amaba con locura. 
Aquí todo diario, mañana seguiré.

Tu enamorada Susana.



6 oct 2010

Totalmente feliz


10/10/2010
Cualquier locura, cualquier sonido, cualquier dulce olor, cualquier textura produce en mí una serenidad absoluta, pinta en mis labios una gran sonrisa, relaja mis músculos y me hace sentir feliz. Exacto, diario. Hoy me siento feliz, no, feliz no, radiante. Mi sonrisa nunca se me borra de la cara, mis ojos desprenden destellos de luz, mis mofletes siempre hinchados, mi mente en blanco, serena, sin ningún problema que la atormente.
Siento una sensación tan agradable. Me siento tan feliz por así decirlo. No consigo enfadarme ni poner mala cara cuando se me  pone por medio algún problema del día, al revés, me entra la risa tonta. Y eso me encanta. Me encanta sentir que ningún problema puede conmigo, con mi felicidad; me encanta sentirme feliz; me encanta reír y reír a carcajadas; me encanta esta sensación, esta sensación de paz.
Me acuerdo que mi abuela cuando yo era una renacuaja, me repetía una y otra vez con su dulce voz de olor endulzante las siguiente palabras: "Una sonrisa significa mucho. Enriquece a quien la recibe; sin empobrecer a quien la ofrece. Dura un segundo, pero su recuerdo, a veces, nunca se borra." Sabias palabras.
Esta mañana antes de salir corriendo hacia el autobús del colegio, mi hermano pequeño Jorge se interpuso entre la puerta que me daría la salida de mi dulce hogar y yo, le miré con cara enfadada a punto de quitarle de un manotazo pues llegaba tarde, él me miró fijamente con sus grandes ojos azules no más de 10 segundos y tras este breve silencio se acercó a mí y me dio un cálido beso en la mejilla después me susurró al oído: "Te quiero mucho hermana." Tras esto, silenciosamente se separó de mí y me dio paso. Me quedé atónita. Este no era mi Jorge ¿Acaso me lo habían cambiado? Aunque si así fuera me encantaría que me lo dejarán así; el corazón me estalla de felicidad cuando alguien muy cercano me muestra sus más sinceros sentimientos hacia mí. Y mi hermano es una de las personas que más feliz me haría en tal caso.
Subí al autobús alegre, contenta, ensimismada en mis apreciados pensamientos. Me prometí nada más sentarme en un rincón del autobús comerme posteriormente a mi hermano a besos. Le debía mucho por hacerme esta mañana más acogedora. Fíjate diario, como las cosas más pequeñas, más insignificantes te hacen sentir mejor, más alegre de un momento a otro.
Tras llegar al colegio me fui directamente a mi clase, eso sí, pasando antes por la clase en la que se encontraba una de mis mejores amigas, Lucía. Una chica de aspecto elegante, con una gran cabellera pelirroja recogida en una enorme trenza, unos ojos verdes con un brillo sin igual. En resumen, una joven de aspecto sereno y muy bello. Como cada mañana le di una cartita y ella otra a mí, para leer cada una, la que habíamos recibido en las siguiente horas de clase hasta que llegara el recreo. Como siempre sus cartas estaban escritas con la más bella caligrafía, bien limpias y con un aroma endulzante.
Tras las dos eternas horas de clase de Biología y Geografía, salí de clase con Alberto, mi mejor amigo, para dirigirme a la zona en la que quedábamos citadas mis amigas y yo. Por el camino me encontré a Ángeles que había faltado las dos primeras horas.
- ¡Qué! Haciendo novillos ¿no? - le insinué a Ángeles.
- Jaja ¿Yo? No, no. Acabo de venir de mi CASA porque me dolía muchísimo la barriga feish - me dijo poniéndome cara de chata.
- Claro, claro...bueno corre y deja la mochila que Lucía me tiene que contar algo - Tras decírselo salió corriendo y no tardo más de 10 segundos en estar de nuevo al lado mía. Alberto y yo flipábamos.
El recreo era la parte que más me gustaba del instituto. Hablaba con todas mis amigas, con las que viven en mi pueblo y con las que viven en el quinto pino. Podíamos espiar a los chicos guapos. Hacíamos mil y una bromas. Animábamos en los partidos de fútbol que se celebran en unos meses exclusivos de cada curso escolar. Y millones de cosas más.
Lo malo que este preciado momento no duraba más de 30 minutos ¡un asco! Volví a mi clase con Ángeles bromeando con Alberto a un lado y con Lucía hablándome a mí y a Natalia a otro lado. Aunque no duró mucho la vuelta ya que pude divisar a lo lejos que mi maestro de francés se dirigía a mi clase con gran rapidez y si no llegaba antes a la clase que él un negativo al canto. Corrí lo más que pude y llegué a tiempo.
Las cuatro horas siguientes de materia me las pasé con un aburrimiento encima inimaginable. Aún así me sentía muy feliz, y además siempre tenía a Ángeles con quien intercambiaba caras raras constantemente. Lo malo que tarde o temprano el maestro te acababa pillando o mirándote con cara de quecarajoestashaciendo.
Cuando por fin pitó nuestro timbre el salvador, para dar paso a la salida del colegio, salí corriendo junto a Natasha, una chica encantadora, hacia el autobús ya que nuevamente estábamos a punto de perderlo, y como que a ninguna de las dos nos apetecía recorrernos unos cuántos kilómetros a patitas para llegar a nuestras respectivas casas. Somos vecinas.
Una vez llegué a mi casa, hice lo que una adolescente corriente de mi edad haría, ponerse con el PC a ver el tuenti, hotmail, blogs, facebook y un largo etcétera. Luego me enfrenté a una dura batalla contra los deberes y estudios. Resultado: victoria.
Al llegar la noche divisé a mi hermano que había estado toda la santa tarde en casa de un amigo. Como prometí me lo comí a besos. Le quiero tantísimo.
Después agotada por el sueño, me acosté, en un dulce y reconfortante sueño.
Aquí todo diario; mañana seguiré.
Por cierto recuerda: ¡Don't worry, be HAPPY!

Susana.

28 sept 2010

¿Locura? Tal vez


09/10/2010
Hoy es un día de estos en los que me encantaría irme de fiesta toda la noche hasta las tantas sin tener que tener ningún tipo de obligación al otro día, es decir, los estudios. Me encantaría emborracharme, volverme loca, olvidarme por completo de mis problemas...esos problemas que me comen tanto la cabeza, hacer mil y unas tonterías, ir a la discoteca, bailar y todas esas cosas que el espíritu rebelde que todas llevamos dentro te pide hacer ¿el por qué de estas ansias de fiesta? simplemente porque estoy harta de sentirme siempre triste, de sentirme inútil, de dejar pasar el tiempo así como así, de aburrirme, de no hacer las tonterías que una adolescente hace; en resumen, de no pasarlo bien y desperdiciar mi juventud. Sí, me gustaría sentirme una persona rebelde por un instante. Sentir todo lo que pronto no podré sentir. ¿Locura? Tal vez.
Mis padres me repiten una y otra vez que los adolescentes desempeñamos una única labor en este alocado mundo, y esa labor es estudiar para que nuestra generación de ejemplo a las futuras. Pero, haciendo una pausa, me da la impresión, siempre me la ha dado, de que estudiando estamos perdiendo parte de nuestra vida, nos quita tiempo, aunque nos enseñe cosas muy variadas el estudiar, nos quita algo muy importante en la vida de un ser humano, el tiempo. Sin tiempo no hay vida. ¿De qué nos sirve estudiar tanto si al final la mayoría de las cosas que estudiamos se nos olvida o simplemente no nos sirve para nada? Una pregunta a la que nunca nadie le ha respondido o tal vez sí.

Susana.

27 sept 2010

Bob Esponja & su eterna sonrisa


08/09/2010
Al igual que la anterior noche, la noche del sábado, en esta noche no pegué ojo. Me sentía aturdida por las confesiones de lo que sentía Javi hacia mí. Me sentía culpable de no haberle dicho nada. Me sentía inútil en esta vida sin fin feliz. Sentía tantas cosas que ni 100 años me bastarían para dictarlas todas.
A veces me preguntaba cómo una criatura como Bob Esponja podía tener siempre esa sonrisa, como yo digo, su eterna sonrisa, y en cambio yo permanecer con una sonrisa no más de 10 segundos. Él siempre con su ingenuidad. Yo cambiando más que el tiempo, era increíble como a veces pasaba de llorar desconsoladamente a reírme a más no poder. Pero Bob nunca cambiada, siempre era él, y cuando digo él me refiero a él más su eterna y deslumbrante sonrisa. Recuerdo cuando tenía no más de 6 años, siempre corriendo de allí a allá, siempre jugando con mi preciado montón de muñecas minuciosamente cuidadas, siempre con mi sonrisa a la que tanto echo de menos. Sí, libre de preocupaciones. Amaba esa vida aunque como siempre dicen "Nada es eterno". A pesar de ello siempre mantengo la esperanza de que alguien, la persona destinada a permanecer a nuestro lado hasta el fin de nuestros días o como llamamos todos nuestra media naranja, aparezca y me haga recobrar la sonrisa más sincera que el ser humano puede otorgar a la vista. Claro que a veces como todo sueño, siento que esa esperanza se va disipando poco a poco como la luz de una vela con un leve soplo.
Aún así seguiré esperando como quien espera ver algún día su sueño cumplido.

Susana.

17 sept 2010

Películas & muchas palomitas


06/10/2010
Los primeros rayos de luz solar llegaron a través de mi ventana a mi rostro blanquecino intentando que me despidiera del tierno sueño, intentando que abriera los ojos y empezara una nueva jornada. Era sábado, un soleado día de sábado, desde mi ventana ligeramente entornada se escuchaban los pájaros piar, hacía tiempo que no los escuchaba ya que con la llegada de octubre el mal tiempo no había dado tregua alguna. Me levanté de la cama helada, con un frío horripilante, a mis padres se les debió de olvidar encender la estufa, corriendo me dirigí al armario y cogí un abrigo de lana que me transmitía un calorcito muy acogedor. Tras esto salí de mi cuarto y me fui a la cocina, no había nadie, supuse que seguirían todos dormidos ¡Rrriiinnnggg! ¡El teléfono! Corrí que me las pelaba hacia él para que no se despertarán. Lo cogí, era Ángeles ¿¡Cómo no!?.
- Hola. Soy ángeles ¿está Susana?
- Hola guapa, soy yo ¿no reconoces mi voz? por cierto ¿no es un poco temprano cómo para ponerse a llamar?
- Jaja sí lo es pero es que estaba aburrida y como tu sueles despertarte a esta hora digo pues la llamo ¿te he despertado?
- No, tranquila, hace unos 10 minutos que me desperté. Por cierto les conté a mis padres lo del cine y lo siento mucho pero no me dejan ir por el hecho del dinero, este mes he gastado 40 y pico euros en la factura del móvil así que lo tengo muy crudo...
- Chica pero ¿tú a quién llamas? En fin que no te preocupes que al final no vamos al cine, vamos a quedar yo, Alexander, Natalia y mi primo Javier en mi casa hoy a las 17:00 ¿sí? Vente porfi.
- Mientras no haya que pagar creo que con suerte podré ir. Bueno te dejo angelito mio que mi padre se acaba de despertar y me va a insistir en que haga el desayuno. ¡Puf!
- Jajaja ¡Te deseo suerte con el desayuno guapa! Te quiero susanita mía ¡Acuérdate, a las 17:00!
- Sí, sí... - Otra vez me colgó. ¡Ains! Si no fuera porque la quiero mucho, me la comería.
Mi padre bajó las escaleras con su matutina cara de dormido. Nos pusimos a hacer el desayuno. Churros, chocolate caliente, huevos fritos, pan con aceite y muchos tipos de dulce ¡Que empachazo me metí!

16:55.
Salí corriendo de mi casa, llegaba tarde, me quedé dormida en la siesta ¡Puf! Su casa estaba a 30 minutos andando de la mía así que llegué tarde sí o sí. A las 17:25 llegué, bueno si uno se fija bien no había llegado tan tarde, solo unos minutos de nada. Pegué en la puerta. Me abrió Javier ¡Oh no! ¡Javier! ¡No me acordaba que  Ángeles dijo que iba también! Me dio un vuelco el corazón ¿Qué debía hacer? Venga, saludo y me meto como si nada.
- Hola Javier ¿Qué tal? Con permiso me meto - dije tan rápido esta frase que creo que no entendió nada.
Entré corriendo. Él mientras tanto se quedó absorto como intentando adivinar que había dicho. Ángeles estaba sentada en su sofá de terciopelo rojo que te hundía nada más tocarlo, miraba películas, todas de terror ¡Qué chica! ¡Cómo se nota que le van las emociones fuertes!
- ¡Hey! ¿Eligiendo película? - Me senté a su lado a la vez que me hundía en el mullido sofá.
- Suuusaaaan no te había visto entrar, supongo que Javi te abrió...por cierto mira mira ¿qué te parece esta película? - Me señaló una que nada más mirar la tapa te recorre un escalofrío por todo el cuerpo.
- ¿"Elle"? Un título curioso ¿Por qué no vemos mejor una de risa?
- Ya hemos hecho una votación y hemos quedado en ver una película de terror, lo siento cari.
- ¿¡Qué!? Pero si yo no he participado en la votación, lo has hecho a drede, mala persona...
- Jaja ¡anda vamos a por las palomitas!
- Vale. Por cierto ¿y Natalia y Alexander?
- Ellos vienen a las 18:00.
Preparamos las palomitas, elegimos unas cuantas películas bueno "elegimos" entre comillas ya que las eligió Ángeles, es una experta, Javi y yo nos dedicábamos a asentir y zampar palomitas a escondidas.
Por fin llegaron Alexander y Natalia. Nos sentamos todos acurrucaditos en el sofá y pusimos una película.
¡Aaaaaaaaaahhhhhhhhhhhh! Gritos y más gritos entre Natalia y yo, estábamos debajo de una manta con la adrenalina por los suelos ¡Sí, lo sé, somos unas miedicas! pero ¿qué le vamos a hacer? Ángeles y Alexander se habían ido al cuarto de Ángeles, figúrate para qué, llevaban 30 minutos en el cuarto. En cuanto a Javi se había acomodado en el sillón del salón y estaba muy atento a la película. En la mitad de la película Natalia se fue ya que había quedado con sus tíos y primos. Nos habíamos quedado solos, Javi y yo.
- ¿Qué tal si dejamos la película para luego y nos ponemos a ver algo en la TV? - me miró sonriendo.
- Buena idea. Después de tanta adrenalina como tengo en el cuerpo no me vendría nada mal una pausa.
Nos acomodamos de nuevo esta vez él se sentó a mi lado ya qué hacia frío y debíamos compartir la única manta que teníamos. Me resultaba incómodo estar tan cerca de él pero a la vez no quería que se separase de mí ¡Qué cosas! No había nada interesante en la TV.
- ¡Qué mierda! No hay nada.
Me incorporé a la vez que él se levantaba a coger palomitas.
- ¿Voy a ver que hacen Ángeles y Alexander?
- Yo que tú no iría - Me quedé pensativa y sí, tenía razón mejor no ir. No quería estropearle este momento en el que por fin después de unos cuantos días volvían a verse Alexander y Ángeles. Me senté de nuevo y me quedé ensimismada en mis pensamientos.
- ¿Sabes una cosa? - me dijo a la vez que se giraba hacia mí.
- ¿Qué? - dije con cierta curiosidad.
- Ya te he dicho esto en la feria pero es que me gustas mucho, desde que te conocí me gustaste, siempre he tenido miedo de hacértelo saber ya que no sabía como reaccionarías pero esta vez te lo digo, no quiero esconderlo más dentro de mí. No hace falta que yo también te guste, ni que salgas conmigo si no te gusto, solo quería que lo supieras, tal vez me esté precipitando, no sé, pero es que es deprimente guardártelo y estar torturándote día y noche - El corazón empezó a latirme muy rápido y fuertemente ¡Bum, bum, bum bum, ...! ¿Qué hago yo ahora? ¿Qué le digo? Por suerte no tuve que decir nada en ese momento se acercó Ángeles a nosotros.
- ¿Qué tal la película, chicos?
- Hemos visto solo la mitad, prima, era un poco fuerte la película - Se levantó y se fue a la cocina con Alexander.
- ¿Qué haciais los dos tan juntitos? - me susurró Ángeles con su sonrisa pícara. Me puse roja.
- ¿No...sotros? Na...nada, solo hablá...hablábamos - Me giré para que no viera lo roja que estaba.
- Sí, sí, claro...lo que tu digas cari.
- Yo ya me tengo que ir a mi casa dale dos besos de mi parte a Alex y Javi - Nos dimos un abrazo y me acompañó a la puerta.
- Adiós guapísima. Mañana te llamo.
- Pero a la hora de comer ¿Okay? No como esta mañana. Chao - Desaparecí tras el muro de su casa.
Seguí andando hasta mi casa por la fría noche de octubre ¡Qué tonta había sido! Tenía que haberle declarado mi amor también ¿Por qué era tan tonta? ¡Dios! ¡Se suponía que ya era madura, una mujercita! ¡Lo había estropeado todo! Deseaba volver al pasado y haberle dicho que yo también le amaba con locura ¡Snif! ¡Ya nada podía hacer!
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana

10 sept 2010

Ensimismada


05/09/2010
Llevo días y días pensando en él, ni siquiera una película, un libro lleno de pasión y a la vez de intriga, cualquier cosita que antes aclamaba toda mi atención, nada, me hace olvidarle, dejar de pensar en él por un instante y eso es lo único que pido volver a mi vida monótona, aunque dentro de mí no quiera volver a esa vida que me tiene cansada y que me roba a cada segundo que pasa mi imaginación al ser totalmente monótona...sé que cuando estas enamorada no dejas de pensar en él, pero es que lo mío es exagerado, me cuesta hasta dormir, a cada segundo me despierto con él dentro de mi cabeza, atormentándome, sé que me estoy tomando muy a pecho esto de pensar en él a cada segundo pero es que nunca me había sentido así, tan llena de amor y felicidad pero con una pizca de tristeza a la vez. Mis sentimientos se desbordan a cada minuto, en un momento me siento rebosante de felicidad sin parar de reírme a carcajadas y en otros me entran ganas de llorar, me siento totalmente triste sin ninguna razón...¿Acaso me estoy volviendo loca? ¿Loca de amor? Mil preguntas sin respuestas.
Anoche recibí una llamada de Ángeles. Como siempre no dudó en invitarme a salir al cine; aunque no me sentía de muy buena gana para salir decidí ir ya que así me mantendría distraída y podría despejarme la cabeza.
- ¿Dígame? Susan al habla.
- Susaaaann....Ángeles al habla - ¡Copiota!
- Jaja Pero si es Ángeles, la persona a la que más adoro en este mundo.
- Oye, oye.. corta el rollo ¿Qué quieres?
- ¿Cómo que qué quiero? ¡Qué!..una amiga no puede piropear de vez en cuando a su queridísima amiga..¡vaya amiga que tengo! ¡me desprecia! -
- Ahora no te me hagas la víctima guapa..soy humana, cometo errores - Claro, claro..
- No, no, no..lo que tu eres es una desconfiada guapita, venga dejemos esta discusión para otro momento que te gastas el saldo y después castigada sin salir...¿A qué debo tu grandiosa llamada?
- Jajaja ¿grandiosa llamada? ¡Anda ya! En serio ¿Qué te pasa hoy? Algo quieres de mí ¿a que sí? - ¡Desconfiada no, lo siguiente!
- ¿Ya empezamos? Puf! ¡Cómo te cuesta ir al grano! Venga dimeeeee...
- Jaja Pues mira que Alexander (su ligue) y yo vamos a ir al cine a ver una peli que ha salido nueva en la cartelera, es esta...esta que es muy romántica...en la que sale el actor este que está cañón...bueno tú me entiendes...¿Te vienes?
- ¿Y para que quieres que vaya yo? ¿Para que os vea besuqueandoos? Y encima si es romántica la peli más papeletas para que os paséis la peli con besos y más besos..¡Bua! Yo no voy guapa, que lo paséis de maravilla con vuestros besos que no me dan nada de celos eh - Bueno un poquito.
- ¡Tía! Pues invita a alguien más, yo que sé, a...¿Natalia? o Cristina...pero veeen...
- Bueno si insistes...me lo pensaré...luego te llamo y te cuento la opinión de mis padres al igual que la de Natalia y Cristina, a ver si les da por venir, que sería un milagro enorme.
- ¡Emborráchalas o drógalas lo que te venga en gana y ya totalmente seguro que vienen! Puf! Que ideas más buenas se me ocurren eh - ¿Eing?
- Sí, sí..en años se me hubiera  ocurrido una idea como esa... - Ironía.
- Bueno Susan te dejo que me voy a cenar y luego sesión de llamadas y mensajes con Alexander. Acuerdate de llamarme eh...te quierooo...un besazo guapísima - Se despide.
- Te qui... - Me colgó ¡Ala! Y después me riñe si le hago algo parecido, en fin la perdono por esta vez.
Ahora que me doy cuenta en estos escasos minutos no pensé en Javier ¡milagro! La verdad es que era una buena idea salir con mis amigas ya que ellas son el único remedio que conozco para tenerte atenta en otras cosas, cómo por ejemplo en espiar al chico que les gusta, aunque sea algo abrumador, me tenía que sacrificar ya que así pasaba un buen rato lleno de risas y más risas.
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana.

8 sept 2010

2º Feria

Continuación...

Tras estar absortos mirando las estrellas, por fin, volvimos al mundo real, al menos yo si; me di cuenta de que nos estarían buscando como locos, así que me levanté rápida y ligeramente pero algo me sujetó con fuerza la muñeca como intentando que volviera a sentarme, Javier. Me volví a sentar y le miré con cara de quepuñetashaces.
- Dicen que si antes de besar a la persona amada has contemplado las estrellas, no la besarás de la misma forma que si hubieras observado las paredes de una habitación, sino de una forma más sutil y delicada - me susurró con la mirada clavada en el infinito cielo. Me quedé absorta sin decir ni una palabra y miles de preguntas empezaron a atormentar mi cabeza como curiosos periodistas en busca de información ¿A qué se refiere? ¿Qué ha querido decir con eso? ¿Acaso solo quiere que vea su romanticismo? ¿Me tomará el pelo? ¿Estará de broma?...preguntas con una respuesta ajena a todo lo pensado. Se giró al verme ensimismada y me levantó la barbilla intentando que le mirara fijamente, me ponía nerviosa estar tan cerca de él, mi nariz rozando la suya y la suya la mía, mis ojos mirando sus grandes y expresivos ojos verdosos, mi labios a punto de rozar sus carnosos labios..a cada segundo más cerca nos encontrábamos el uno del otro, hasta que al fin me lo dio ¿Que qué me dio? Pues me dio "eso" que expresa tantas cosas cuando lo das, "aquello" que tanto demuestra sobre lo que sientes hacia esa persona...sí, un beso alocado pero dulce muy dulce.
Tras darme ese beso que me hizo ver las mismísimas estrellas se fue separando muy lentamente de mí, como si no quisiera estropear el momento pero a la vez comprendiera que eso no podía ser eterno; seguía ensimismada, cómo si nunca me hubieran dado un beso, pero en efecto nunca me habían dado uno tan tierno y dulce. Entonces como si no hubiera ocurrido nada se levantó y miró a lo lejos a la vez que me señalaba:
- Deberíamos volver ya con los otros, deben de estar preocupados - ¿¡Qué!? ¿¡Cómo!? ¡No me seas payaso! Después de la tensión que me has metido me sales con eso.
- Em...bueno...sí...tienes razón, deberíamos...deberíamos volver - Lo que más me reventó fue mi reacción, como puedo ser tan tonta y a la vez tan pava. Me levanté de un salto aunque algo trastornada aún y le seguí. Lo notaba raro. Estaba muy callado, deseaba que me hablara, que me dijera "Ey mira que te he dado el beso porque..." deseaba alguna explicación; pero nada...no me dijo nada.
Llevábamos 15 minutos buscando a los demás hasta que juré ver la figura de Ángeles, le toqué el hombro y se giró asustada hacia mí, me abrazó y sí, había estado preocupada.
- ¿Dónde os habíais metidos majaderos? - A veces la confundía con mi madre, esa forma de expresarse cuando estaba preocupada y enfadada a la vez era igualita a la de mi madre..
- A mi no me mires, Susanita insistió en ir a la tienda de Robinson a por unos cuántos dulces y encima la muy zampabollos se los comió todos por el camino - Dijo Javier guiñándome el ojo ¡Pero que mentirosillo está hecho! ¡Y encima me llama Susanita y lo que es peor zampabollos! Pero en fin esta vez se lo perdoné ya que me había ahorrado el inventarme una excusa.
Ángeles me miró con cara "¿seguro?" y como no veía ninguna reacción anormal en mí, se lo creyó, y sin más dilamiento nos fuimos a probar algunas atracciones. Sobre las 00:30 nos apresuramos en ir hacia la entrada de la puerta, nos esperaban nuestros padres ansiosos por saber de nosotros y acostarse de una vez por todas. En el camino Javier se acercó a mí y me volvió a susurrar:
- Espero que no te haya molestado el beso, no encontraba forma de decirte cuánto me gustas a pesar de que ahora mismo acabo de decírtelo - sonrió y seguidamente se despidió de todos nosotros al tener que marcharse ya.
Noté que dentro de mí empezaron a salir espontáneamente gritos y más gritos de júbilo. Me sentía feliz, llena de una enorme felicidad y eso que yo misma creía que a Javier ya no lo quería tanto como antes, pero se nota que estaba totalmente equivocada, muy equivocada. Aún seguía queriéndole, aunque esta vez mucho más.
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susanita ¡Oinch! ¡Javier!

Susana.

30 ago 2010

· Premio de Claudia Loving Music :)


Hola chicos! :)
Esta es una noticia que me alegra mucho!
He recibido un premio de:
Claudia Loving Music.
Muchísimas gracias Claudia por este premio; eres impresionante! Te lo agradezco muchísimo; es mi primer premio así que estoy rebosante de felicidad; Gracias, gracias y mil gracias más ;)
Por cierto os recomiendo sus blogs, por si alguien esta interesado; os encantará:
- http://mynotsecretworld.blogspot.com/
- http://diariodelasimple.blogspot.com/ 
Bueno, aquí están las reglas:

Crea un post en un blog, copia la imagen y las preguntas. No olvides mencionar quién te ha taggeado. Luego respóndelas y finalmente taggea a alguna blogeras.
Preguntas:
1. ¿Por qué te creaste el blog?
- Me lo cree porque sentía que tenía mucho tiempo libre ya que mis hobbys no me llenaban ese hueco que aún quedaba por cubrir así que como adoro escribir decidí hacerme uno hablando sobre una adolescente; y la verdad me lo paso bomba escribiendo aquí y encima conociendo blogeras y viendo sus fabulosos blogs.
2.¿Qué tipos de blogs sigues?
- Pues sobre todo novelas; me encantan.
3.¿Tienes alguna marca preferida de maquillaje?
- No, la verdad es que no, no suelo maquillarme mucho y soy una negada en cuanto a recordar y saber de marcas ;)
4.¿Y de ropa?
- Pues la que más me gusta es Bershka; la adoro. También me gusta Springfield, no sé si os sonará, me gusta porque es justo mi estilo.. y muchos más que ahora mismo no se revelan en mi memoria.
5.¿Tu producto de maquillaje imprescindible?
- Pues como ya he dicho no me maquillo mucho aunque el pintalabios es uno de ellos y también la sombra de ojos.
6.¿Tu color favorito?
- Esta respuesta la tengo clarísima ¡el rojo! Adoro este color...aunque también tengo como favoritos el verde manzana y el azul.
7.¿Tu perfume?
- Muchísimos. 
8.¿La película que más te ha gustado?
- ¿Solo puedo decir una? Es que tengo miles y miles de películas favoritas; El Titanic, un clásico, es uno de los que más me gustan.
9.¿Que países te gustaría conocer y por qué?
- Sin duda alguna EEUU, sobre todo las ciudades de Nueva York y Los Angeles porque me fascinan.
10. Esta pregunta háztela tú y respóndela.
- ¿Cuál es tu mayor hobby?
   La fotografía :) 

Se lo paso a:
- Marta; http://enganchateamarta.blogspot.com/; un blog que requeteadoro!
- Metia; http://frescocomounpolo.blogspot.com/; también le tengo mucho aprecio;)
Y no sé a quién más; a Martita; http://perdilacabeza.blogspot.com también aunque es el mismo premio y no sé si se puede entregar, pero si pudiera, a ella con muchísimo gusto también; su blog cuenta una historia muy interesante y preciosa.

¡MUCHÍSIMAS GRACIAS! 
Besos a todos <3

29 ago 2010

1º Feria



02/10/2010
Hoy me desperté con cierta melancolía, pero ¿a qué? sinceramente no sabría decirte a que, solo puedo decirte que me desperté con una melancolía que bañaba todo mis pensamientos al igual que mis sentimientos. Pero no dejé que esto me estropeara el día, hoy sentía que iba a ser un día diferente e inolvidable.
Hoy no empezaré contando, aunque casi nunca lo hago, lo ocurrido de la mañana a la noche, no, hoy iré a lo principal, a lo que de verdad importa; A las 21.30 quedé con quienes ya te conté ayer, Ángeles, Natalia, Álvaro y Javier; sí, ellos cuatro.
Mi madre me dejó a las 21.15 en la entrada de la feria ya que había quedado con sus amigas, que son nada más y nada menos que las madres de mis compañeras de clase con las que mejor me llevo; así que como te imaginarás tuve que esperar unos largos y eternos 15 minutos en la entrada, por suerte no tardaron en llegar.
- ¡Hola tropa! - les saludé.
- ¡Ey! Susan...tú la primera en llegar...no me lo creo...debo de estar soñando, pero si siempre llegas tarde allí donde vayas ¡Jajaja! - Me dijo Ángeles con su típica cara de sarcasmo. ¡Ains!¡Ella siempre tan simpática!
- Ja, ja, ja ¿acaso no recuerdas cuando quedamos para ir juntas a la fiesta de Lucía? ¿Quién llegó la primera? ¡Moi! - contraataqué.
- La única vez...y debo decir que fue un milagro -
- Oye chicas ¿nos metemos ya en la feria o vais a seguir discutiendo? - dijo Javier con una sonrisa pícara.
- Nos metemos - contestamos Ángeles y yo al unisono.
La feria era un total escándalo, música a tope...lugar perfecto para dejarte los tímpanos, gente a raudales, me dieron más de cuatro pisotones. Aunque eso sí unas atracciones alucinatemente  alucinantes, incluso pude fijarme en unos chavales detrás del "barco vikingo" que estaban vomitando, lo que se dice dejarse las tripas ¡Pobres! Pasada una media hora de andar y observar las atracciones Ángeles y Natalia nos dejaron a mí y a los chicos para montarse en los "cochecitos choques", nosotros seguidamente nos sentamos a observar.
- ¡Que cara tienen! ¡se van y nos dejan tirados! nadie diría que somos primos Ángeles y yo, ya que yo soy más gentil ¿a que sí? no me iréis a decir que no.. - dijo Javier en su intento por romper el hielo.
- Claro, claro..si tu lo dices - dije con ironía.
- ¡Jajaja! Venga chicos luego vengo, tengo que irme a esperar a mi novia a la entrada; no tardo mucho - dijo yéndose Álvaro.
- ¡Ok! Bueno ya solo quedamos tú y yo Susanita - me miró Javier.
- Sí, nos han abandonado; por cierto detesto que me llamen Susanita, llámame Susan a secas - le ordené.
- No sé, me gusta más llamarte Susanita, suena más gracioso, ¡Ey Susanita! Susanitaaa...Susanitaaa... - empezó a imitar con voz de burla mi nombre mientras se reía e intentaba picarme.
- Quien avisa no es traidor, como sigas te juro que te enteras - Amenazé.
- Susanita ¡Ey! Susanitaaa...Susanitaaa...- ¡Será cretino!¡Ahora si que se iba a enterar!
- No sigas que sé judo y karate y no me haría ninguna gracia hacerte daño -
- Claro, y yo sé kung fu - se me burlaba. Bueno mentí un poquito, solo sé judo, de karate no tengo ni idea.
Le empecé a hacer gestos, a la vez que intentaba perseguirlo y cogerlo con toda mi mala fe. Nos alejamos de donde se encontraban las atracciones hasta que llegamos asfixiados a un descampado que no estaba muy lejos de la feria.
- ¡Uf! ¡Estoy que me ahogo! - decía mientras intentaba coger aire.
- ¡Cómo corres condenado! -
- Jajaja ¿A la Susanita se le han gastado las fuerzas?
- No me obligues a darte - No sentamos y nos empezamos a reír.
Mirábamos el cielo en todo su esplendor; las estrellas como pequeñas lámparas colgadas en un cuarto oscuro, muy oscuro; la luna tan esplendorosa... Eran las 11:00 nos habíamos quedado embobados hablando de las galaxias, los extraterrestres, ... decidimos volver ya que los demás o estarían pensando que nos han secuestrado o que nos habíamos liado ¡son unos mal pensados, lo sé! Ojalá no hubiera transcurrido el tiempo, me encantaría haber podido meter este escaso recuerdo en el que estuve con él a solas observando y hablando de galaxias, aunque el tema no era muy romántico que digamos, en un pequeño baúl, mi baúl de los recuerdos, pero no podía...
Diario, debo terminar de escribir, es tarde y debo acostarme, mañana seguiré contando la continuación de este capítulo.

Susana.

27 ago 2010

Recuperada & totalmente HAPPY


01/10/2010
Después de dos días insoportables metida en la cama con un pedrusco gigante de hielo en la frente, por fin, me recuperé, he vuelto a nacer; añadiéndole unas tremendas ganas de correr, bailar, cantar, reírme a carcajadas a mas no poder, vivir miles de aventuras y muchas más cosas; nunca me había sentido tan feliz, como yo y Ángeles decimos me siento totalmente HAPPY, es una sensación extraña, no paro de sonreír y reírme incluso tengo un dolor de mofletes de tanto sonreír tremendo; hasta Jorge esta asustado, según el le intimido con tanta sonrisa, incluso me ha obligado a prometerle que nunca más me volveré a poner enferma ya que desde su punto de vista sufro un tipo de delirio después de un resfriado ¡alucino con mi hermano! este chaval tiene mucha imaginación, menos mal que con los años se va perdiendo porque sino lo tengo claro.
Además de esta noticia tengo otra que contarte diario, tengo planeado ir a la feria mañana con Ángeles, Javier, Natalia y Álvaro ya que dentro de nada terminará la feria y todavía no he ido ni un segundito de mi monótona vida. No te contaré la de llamadas que tuve que hacer para contactar con estos cuatro y la de discusiones que tuve con mi madre para que me dejara ir ya que creía que todavía estaba en mal estado para ir, pero si me vieras diario dirías todo lo contrario, estoy como un roble, no, no, mejor que un roble!
Por cierto te has fijado que entre los cuatro está Javier, también viene, aunque debo admitir que ya no estoy tan coladita por él, antes me daba la sensación de que parecía una niña tonta, cursi e inmadura que solo va detrás del chico que le mola y a la que solo le interesan los chicos, pero no quiero pertenecer a ese grupo, mi orgullo no me lo permite ni yo misma me lo permito, quiero ser liberal, preocuparme y dedicarme por otras cosas que no sea solo fijarme en chavales, no va conmigo, además los años anteriores ya estuve experimentando y debo decir que mis exnovios fueron como un timo, muy sosos, solo eran como una chica quiere que sean el primer día y el segundo, los demás días eran unos sosos pero sosos...
En fin diario... ¿sabes qué? eres como la hermana que nunca tuve, sí, suena raro, cualquiera que lo leyera diría a esta se le ha ido la pinza decirle a un diario que es como su hermana, pero es que a tí te lo cuento todo, cada secreto, cualquier cosita que sea parte de mí y que haya dejado un gran rastro en mí, mis pensamientos, algunas sensaciones que experimento, todo todito, en todo lo que llevo de vida nunca he encontrado a nadie a quién contarle todas mis cosas, en la que desahogarme...y me dirás ¿y Ángeles o cualquier amiga tuya? Pues a ellas  las quiero mucho y les tengo mucha admiración pero no son lo que yo busco, es decir, una persona que lo guarde todo y que sepa cuando callar y cuando hablar.
Bueno es tarde y tengo muchísimo sueño a pesar de que llevo días en cama; así que dejo de escribir para acostarme e irme a soñar, a ver que sueño hoy; ayer soñé que unos zombies intentaban sacrificarme a su diosa zombie, sí, tienes razón, veo muchas películas.
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana.

19 ago 2010

Rabia & dolor



29/09/2010
Me encantaría poder gritar y gritar de la rabia que siento por dentro, pero me resulta imposible, mis cuerdas vocales no me responden, el resfriado ha ido a peor; me siento atontada, la fiebre me sube y me baja, hace nada 39.12, ahora 38.34 ¡me bajó! ¡qué alivio! Aun así me cuesta hasta escribir, pensar y sentir; según el doctor no debo hacer ningún esfuerzo, pero necesito hacer este esfuerzo, escribir en mi diario, hace días que no escribo en él, necesito llenarlo de mis sentimientos, de mis pensamientos, ... para hacerlo mi diario.
Ayer, domingo, me llamó Ángeles estaba preocupada porque no daba señales de vida, normal, en mi estado cuesta hacer movimiento alguno...como te he dicho hablar me era imposible así que tuve que comunicarme con ella mediante Jorge, no me hacia ninguna gracia pero si quería informarme tenía que hacerlo, puf! lo peor que mi hermano no paraba de cotillear haciendo mil preguntas, por suerte mi madre le repitió que solo debía comunicarme entre ella y yo ¡salvación!
Me dijo que hoy iban a ir a la feria ya que habían entrado atracciones mejores, en las que las emociones eran realmente fuertes, me entraron unas ganas de ir ALUCINANTES a pesar de que no me va eso de las emociones fuertes pero en fin como también me dijo que iba a ir con Javier pues ya no me importaba ni eso ni nada, lo único que si importaba era mi estado, era desolador, no podía ni moverme y estaba rojísima del calor que me daba  la fiebre, ni las toallitas de hielo consiguieron aliviarme ese calor tan insoportable, ni por arte de magia podría ir así que me quité todas esas ilusiones que fui formando mientras hablaba con ella. Quería llorar, gritar, ... todas esas cosas que quieres hacer cuando te sientes llena de rabia e ira a la vez, mis ojos se llenaron de lagrimas al acabar de hablar con ella y decirle con mucho dolor a mi hermano que le dijera que no podría ir, que me era imposible...se despidió con tristeza deseándome que me recuperara lo antes posible "¡eso espero querida Ángeles!" me decia.
Debo descansar me siento mal, la fiebre no me da tregua, es mas me esta subiendo ¡No!
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana.

18 ago 2010

Soledad


25/09/2010
Hoy fue un día aburrido, melancólico y doloroso por parte del resfriado que he cogido y que no me ha permitido ir a clases (¡Bien!), también solitario ya que mi madre se ha pasado la mañana desayunando en una preciosa y sencilla casita de la madre de mi compañera Cristina, como lo tenía planeado desde hace días y le hacía tanta ilusión ir no quise estropeárselo, así que me he estado entreteniendo con la TV aunque solo salían programas del corazón y publicidad, mucha publicidad, también me entretuve con mi hamster Minina, por el nombre habréis descubierto que es hembra, aunque no paraba de cagarse y mearse encima mía quedando el pijama hecho un asco, tuve que ponerme una camisa de esas que utiliza mi madre para pintar sus cuadros, largas y manchadas de pintura. Pasada una media hora Minina se me durmió en el brazo, tuve que meterla minuciosamente en su preciosa jaulita de metal; ahora mi única distracción era una mariposa que revoloteaba por el salón como si intentara escapar, escapar de las grandes y altas paredes de mi casa, estuve observando como revoloteaba de allí a allá, llegó a posarse en mi mano pero no duró más de un minuto; la única sensación que me vino durante los minutos que estuve mirándola fue un aburrimiento pesado, tan pesado que el cansancio de apoderó de mí llevándome al sueño, ese reconfortarte sueño al que todos adoramos. Me dormí.
Me desperté sobre las 14:00, a esa hora mi madre volvió, si que se tiró un rato largo en la casa de Cristina, un poquito más y vuelve por la tarde-noche; nada más llegar se puso a limpiar la casa y yo mientras tanto me puse a pensar y soñar en ese mundo imaginario con el que todas las adolescentes soñamos, un mundo en el que todo gira alrededor nuestra y en el que nada es imperfecto....ese mundo....¡¡RIIINGGG!! ¡¡RIINNGG!! el teléfono suena, mi madre corre hacia él una vez que lo coge empieza a poner cara de preocupación y enfado a la vez, no es difícil adivinar de que se trata, esta clarísimo, es ¡Jorge! Algo ha hecho.
Cuando termina con el teléfono seguidamente coge  el bolso y sale por la puerta, no me da explicación alguna, supongo que ya habría adivinado que sabía de que se trataba.
-14:55, mi madre llega con Jorge y Iván, los dos memos de la casa, al parecer Jorge se ha peleado con un niño de su clase, el matón de su clase, Francisco, gordito y super ancho; pero lo que más me sorprende es que mi madre no esta enfadada le da la enhorabuena y todo, a veces no la entiendo, aunque también me siento orgullosa de que mi hermano se haya enfrentado a él, se lo merece ese matón!
La semana que viene es feria en mi pueblo así que supongo que iré si este maldito resfriado se me cura, ya que según Ángeles su primo Javier se vendrá con nosotros y según otros contactos a roto con su novia, puf! no podría presentarse una oportunidad mejor para que pudiera estar con él. ¡Te amo destino!
Aquí todo diario; mañana seguiré.

Susana.

17 ago 2010

Cine & Burger King


21/09/2010
Hoy me desperté sobre las 8:15, últimamente me despierto más temprano de lo habitual será porque ya empezaron las clases y debo despertarme a las 7:30 ¡qué coñazo! Decidí levantarme.
Desgraciadamente cuando fui al salón a tumbarme en el sofá para despertarme por completo estaban mis 2 hermanos, Ivan de 18 años y Jorge de 10 años, ocupando los 2 sofas que había ¡Otro coñazo más! Tuve que sentarme en el sillón "sagrado" de mi madre que es super incómodo aunque menos mal que estaba ese sillón sino tendría que sentarme en el suelo porque mis hermanos dudosamente me dejarían un sitio.
Sobre las 11:00 me puse a desayunar un tazón de cereales de chocolate deliciosamente ricos... mmm... cuando terminé mi madre ya puso a mi cargo unas cuantas tareas de esas pesadas que suele ponerme y yo nuevamente como cada día empecé a quejarme de que a Iván no le pusiera ninguna tarea, me daba rabia verle a él allí con el PC mirando el tuenti tan tranquilo y sin ninguna carga y yo ahí trabajando como una negra, me reventaba eso! Mi madre no tardó en ignorarme, puf! a veces me da la sensación de que no somos madre e hija.
Cuando por fin terminé las odiosas tareas me puse a llamar a mis amigas para ver a que hora al final quedábamos para ir al cine, a las 18:00; un poco pronto, ¿no? Pero en fin con tal de estar fuera de casa, fuera de la mirada asesina de mi madre cualquier cosa.
-18:00.
Estoy en el cine y veo a Ángeles mi mejor amiga con su ligue Alexander, como ella dice su gran amor, ella es delgada y no muy alta de pelo castaño corto y claro y muy morena de piel ¡Qué envidia!
No tardaron en llegar los demás y tampoco tardamos en entrar en la sala de cine, vimos 'El aprendiz de brujo'. Tras terminar de verla nos fuimos al Burger King y nos dividimos en unos piden y otros cogen mesa, yo fui al grupo pedir comida junto a dos amigas (Natalia, Cristina) y dos amigos (Alvaro, Javier), uno de los cuales el primo de Ángeles, Javier, es perfecto mires por donde lo mires, cuerpo, cara y personalidad! Desgraciadamente ya tiene novia aunque por lo menos somos muy buenos amigos!
Pasado unos 30 min. en la cola  Natalia, Cristina y Álvaro se fueron a la mesa a llevar lo pedido, así que me quedé con Javier esperando a que nos tocara pedir; ¡Era tan mono hablando! Me quedaba enbobada aunque intenté quitarme la bobería, me habló sobre su grupo de música, que practicaba natación ¡Ya entiendo porque estaba tan fuerte!, y muchas otras cosas más...Cuando nos toco pedir me preguntó:
- ¿Quieres que te lo pida yo?
- Si quieres vale, no me importa.
- Venga te lo pido porque me gustas!- las dos ultimas palabras las dijo bajando el tono cada vez mas.
Me quedé con cara de no haber escuchado nada, es decir, me hice la tonta, para que no viera mi fascinación.
Cuando ya nos dieron lo que habíamos pedido nos fuimos a sentarnos con los demás; me senté con Ángeles y delante mía ¡Javier! ¡Joder! ¡Me daba corte estar tan delante de él!
Estuvimos comiendo unos min. tranquilamente hasta no sé que pasó (ya que no podía quitarle la mirada a Javier) que Ángeles se cabreó y le tiró la bandeja a uno de nuestros amigos al que llaman "Retrasado mental" pero es Luis, entonces ya se armó la buena, Alexander se levantó enfadado y empezó a vacilar contra Luis; Al final nos tuvimos que ir con las bebidas porque la gente no paraba de mirarnos! Fuimos a una fuente e intentamos hacer las paces, pero de nada sirvió...aunque a mi no me importó ya que Javier estuvo todo el tiempo al lado mía haciéndome bromas y hablando...
Las 00:00 mi madre me recogía en la parada de autobuses! y yo todavía estaba en la plaza del pueblo me despedí de todos rápidamente y me fui corriendo que me las pelaba hacia la parada de autobuses por suerte llegue justo a tiempo...
Nada más llegar me duché y me acosté, eso sí, siempre pensando en el guapo de Javier.
Aquí todo diario, mañana seguiré.

Susana.

¿Cómo empezar?



Querido diario...no, no; suena cursi...estimado diario...no, no; ni que estuviera escribiendo una carta...entonces ¿cómo empiezo? ... ¡Ya sé! Pondré la fecha y escribiré lo sucedido de la mañana a la noche; ¿o mejor no? en fin para que tantas molestias si la única que lo leerá seré yo...¡EMPIEZO mi primer diario!

20/09/2010
Empezaré por presentarme; Me llamo Susana aunque mis amigas me llaman Susan, no cambia mucho la verdad solo se quita una 'a'...¿mi edad? 15 años pronto 16, se podría decir que estoy en la flor de la vida, al menos eso dice mi madre, se nota que no conoce los problemas de una adolescente, habla como si ser adolescente fuera como ser un bebe, pero para nada, ser adolescente es complicado, los ánimos cambian constantemente, pasas de sentirte alegre a enfadada y así sucesivamente...
En cuanto a mi físico soy alta y delgada de cabello castaño, largo y liso, ojos azules y una piel blanca como la nieve que suele fastidiarme en verano porque solo ponerme una mijita al sol ya se me quema, me paso el verano roja en vez de morena, para consolarme me dicen que la piel blanca resulta muy sexi entre los chinos pero de que me sirve serle sexi a un chino :|
Ahora cuento como una adolescente de 15 tiene un diario, pues te cuento, hace un semana mas o menos fue mi santo así que algunos amig@s me regalaron regalos y a esto que viene mi abuela (a la pobre la operaron de las caderas por un hueso roto y casi no se puede mover) a mi casa acompañada de la "niñera" que le cuida en su piso, se acordó de mi santo y quiso venir conmigo ¡cómo se lo agradezco!; después de almorzar me regaló este delicado diario de tapas de terciopelo rojo suaves al tacto, al principio cuando lo vi me quedé "pillada" ya que me esperaba ropa, algo de maquillaje (a pesar de que mis padres me prohiben el maquillaje) u otra cosa para chicas que ya ni son niñas ni adultos todavia! pero en fin lo acepté con mucho gusto y le prometí que hoy mismo lo empezaría, dicho y hecho :)
En fin debo irme a cenar que el hambre me come y después acostarme para empezar un nuevo día mañana domingo, quedaré con los amigos para ir al cine y tomar algo en el Burger King aunque prefiero en la pizzeria pero que le vamos a hacer la mayoría de los votos fueron para el Burger King; bueno ya te contaré como fue!

Susana.